domingo, 25 de octubre de 2015

Flaca

Habiendo sido una flaca huesuda toda mi vida he desarrollado ciertas estrategias para pasar por el mundo como si realmente eso no me importara...

El mundo de los flacos es realmente interesante. Casi siempre a esta categoría pertenecen niños, jóvenes y adultos que sin sacrificar un comestible que pase por sus manos, pueden comer, comer y comer y no suben de peso. Los falsos flacos en cambio, son las personas que siempre se prohíben comer y hacen dietas y ejercicios para bajar de peso o para mantenerlo.

Los flacos nunca entendemos eso de no comer lo uno o lo otro. No entendemos como una persona no disfruta un cena con amigos por el simple hecho de no poder aumentar de peso. Tampoco entendemos lo que es contar calorías, reemplazar alimentos sabrosos por otros insípidos, saltarse el postre, o evitar un delicioso vino o coctel. No creo que la felicidad dependa de la comida o la bebida pero abstenerse constantemente de cenar o beber cosas deliciosas debe ser frustrante.

Ser flaco en un mundo de personas rellenitas es un fastidio. Sólo para nombrar algunos aspectos: encontrar ropa interior y exterior apropiada no es fácil -siempre hay que arreglar para que entalle-; si eres de poco comer son muy contados los restaurantes que sirven medias porciones o porciones para niños; la gente te mira casi con lástima y sugieren siempre la presencia de anorexia o enfermedad, los mejores piropos nunca son para las mas flacas, todos te calculan menos edad de la que tienes... 

Y, además, constantemente, tenemos que lidiar con las bromas sobre poder guardar líquido en el hueco de la clavícula, no necesitar radiografías para ver los huesos, estar desnutrido, la falta de "carnes", las piernas como cigarrillos, los codos y rodillas como armas corto punzantes, nos va a arrastrar la brisa, etc.



En el aspecto romántico, no es muy inspirador ser flaco. No sé si habrá poemas o citas románticas dedicados a una flaca. Si las hay, no deben ser muchas. Como tampoco son muchas las canciones, aunque las que aquí incluyo son muy lindas...

                                         


Hasta hace poco los flacos eran normalmente vistos como menos alegres que los no flacos, algo así como portadores de enfermedades, penas, sacrificios y maldades ¿han visto muchas brujas que no sean flacas?

 

Tal vez por el boom de la delgadez en la moda y la comida sana en la salud, ahora los flacos tenemos un mejor estatus que antes aunque siempre alguien, generalmente rellenito, te diga en la cara: Por qué estás tan flaca? estás enferma? eres anoréxica? estás pasando apuros económicos? o penas de amor?

Cuando niña en el colegio, la gran mayoría de compañeras eramos flacas y sólo se distinguían 2 o 3 rellenitas. Conforme fuimos creciendo y llegamos a la adolescencia ese grupo de flacas evolucionó a jovencitas con buenos cuerpos, ya no tan delgadas aunque esbeltas todavía. Aquí la ecuación se invirtió: solo 2 o 3 seguimos siendo flacas huesudas en un mar de cuerpos bien moldeados.

Por supuesto, sólo las flacas pasábamos menos trabajo a la hora de los deportes, de las comidas y de la vigilancia familiar -no despertábamos ni un "mal pensamiento"-. Ya en la universidad y los primeros años laborales, las cosas se logran equilibrar porque aunque todavía muy delgadas, ya tenemos mas carnes y además la mayoría de las chicas de cuerpos lindos empiezan poco a poco a subir de peso.

Y ahí es donde comienza la tiranía de las dietas y parece que el mundo sólo se divide en dos grandes grupos: los flacos y los que quieren ser flacos. Porque aunque muchos tengan el peso ideal, siempre quieren ser mas delgados y estilizados, siempre quieren entrar en todas las modas que el capricho de los modistos crean. Creo que hasta alguna vez quise hacer parte de ese gran grupo que vive preocupado y haciendo sacrificios para verse delgado y que no me mirasen como un bicho raro sólo por ser flaca!

Así que me acostumbré a callar que desayuno tres o cuatro veces al día, que almuerzo poco pero tomo medias tardes bien calóricas, que ceno temprano pero antes de ir a la cama ya he comido cualquier tentempié.

Y también me acostumbré a darle un velo de glamour a ser flaca, aceptando que hago dieta para estar así (solo que no digo que es para ganar peso), sugiriendo que me gustaría quitarme algún rollito de "no se donde" (tampoco miento del todo aquí porque siempre hay un centímetro de mas en la cintura o en la cadera para tener la figura de las modelos), que la ropa me queda holgada porque no tengo mas ese kilito que no me gusta (ese es el tipo de ropa con el que me siento cómoda), que hago mucho ejercicio para mantenerme así (cuando en realidad éste no modifica casi en nada mi peso en la báscula)...

De esta forma he pasado por la vida sin estar dando excusas por ser flaca, sin hacer sentir a nadie culpable por estar pasado de peso y sin sentirme yo culpable por no sacrificarme para tener un peso al que siempre quise agregarle unos 4 o 5 kilos mas...

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